Si bien es cierto que a las marcas se les asigna una clasificación específica en el registro, la verdadera pregunta es si existe una “probabilidad de confusión” entre las dos marcas. Usando su ejemplo, las computadoras Apple y las estufas Apple pueden coexistir porque un consumidor que compra una estufa Apple probablemente no comprará esa estufa con la impresión de que la estufa está siendo provista por la misma compañía que fabrica las computadoras Apple.
Sí, las computadoras y las estufas se clasifican de manera diferente, pero esa no es la verdadera razón por la cual las computadoras Apple y las estufas Apple pueden coexistir. Puede haber una situación en la que dos compañías encajan en clasificaciones diferentes, pero la USPTO no permitirá que ambas marcas registradas se registren porque existe el riesgo de confusión. Por ejemplo, una compañía de ropa que usa Apple en asociación con su ropa, y un minorista de ropa en línea podría querer usar Apple en asociación con su tienda minorista. Si bien los servicios de ropa y venta minorista se ajustan a dos clases diferentes de marcas comerciales, todavía existe la posibilidad de que un consumidor se confunda al pensar que el minorista de ropa vende su propia ropa con la misma marca, o que la compañía de ropa tenga una tienda en línea para vender su ropa. Debido a que las dos compañías están en industrias relacionadas y existe un riesgo de confusión, es probable que la USPTO no permita que ambas marcas se registren, a pesar de que las dos compañías operan en diferentes clases de marcas.